AL principio de
realizar el blog “Cosas mias” escribi esta historia de amor que en aquel
entonces me pareció hermosa. Hoy quiero rescatarla para el reto de “San
Valentin” de nuestros amigos de
“ACOMPÁÑAME”, espero que os guste.
SORAYA Y MANUEL
Soraya era una mujer de una belleza serena. Su mirada verde
había ganado con los años una dulzura que invitaba al descanso en sus pupilas . Su sonrisa lejos de haber perdido encanto se engalanaba
cuando se achinaban sus ojos acompañándola. Lo malo es que sonreía poco. No
hacía muchos días que celebró su 50 cumpleaños. Celebrar es una forma de
hablar, lo cierto es que Soraya se encontraba sola. Hace 20 años que Juan (su
marido) falleció en un fatal accidente de tráfico. Sus dos hijos hace tiempo
que marcharon por cuestiones laborales fuera del país y aunque no faltaba
semana que la llamaran, ya eran dos años sin verlos.
Soraya...... tenía un secreto.
Su mujer tras una larga enfermedad que mermó sus ahorros y
su salud dejó este mundo a la edad de 28 años sin haberla dado tiempo siquiera
a tener descendencia. Manuel fué un loco
enamorado de ella. Se juro a sí mismo que nunca querría a nadie más.
Manuel..... también
tenía un secreto.
Soraya y Manuel se conocieron a través de internet.
Relativamente porque nunca quedaron en
verse.
Dos años hace que la casualidad les puso en contacto y desde
entonces no ha habido día en que faltaran a su puntual cita de las 21´00h.
Se han contado de todo, han hablado de la época laboral, de
sus hobbyes de cómo a Soraya le gustan las rosas blancas
y de cómo a Manuel le gusta las noches de verano salir con su telescopio a
contemplar la osa mayor…. O lo que se
cuadre. A ambos les gusta Bach.
Pero aunque comparten muchas cosas, jamás han hablado de
amor.
La poesía les
transporta a lejanos lugares, en el teatro gustan debatir sobre la maestría
de tal o cual actor o actriz. Un paseo por el campo les supone un placer a sus
sentidos y hasta un vecino que les trae por la calle de la
amargura tienen en común.
Entre risas y
cyber-enojos, Soraya le cuenta
como el susodicho vecino pintando la fachada de su casa salpicó su coche bien aparcado (por supuesto)
y no se atrevió a decirle nada porque
debía de ser un bruto inconsciente cuando ni siquiera se dio cuenta de ello.
“Y más cosas que ya te contaré”. Le dice.
Manuel por su parte tiene una vecina dueña de un perro sin
educar que posee la puntual costumbre de hacer sus necesidades en la pradera de
césped que Manuel cuida con mimo.
Cosa que le ha
supuesto en alguna ocasión una leve subida de tensión por no regañar con ella.
Porque no olvidemos…. Manuel, es un caballero.
Y así pasaban los días.
Una de tantas tardes la vecina de Manuel con su acostumbrada distracción dejo
nuevamente que el perro se colase en la praderita que tan bien cuidada tenía
este. Ni corto ni perezoso Manuel corrió
por la cámara fotográfica con la intención de denunciar a su vecina. Sacó un
buena instantánea y orgulloso de su caza esa misma tarde lo comentaba con
Soraya.
Manuel: - “Y es que
date cuenta que la tía parece distraída con su aire de Hippie y el perro todos
los días se hace sus necesidades en mi
jardín. ¿Quieres ver la foto de
esta maleducada señora?”.
Soraya: - “
Claro Manuel mándala a mi correo, sin duda y a pesar
de todo sera una escena cómica”.
Manuel -“ ¿La
recibiste?.
Soraya –“ Ya lo creo. ¿Quieres ver la foto que tengo yo del vecino en plena
tarea?”
Manuel- “Por supuesto
Soraya, así los dos pasaremos un buen rato riéndonos”.
Soraya- “ Pues está en marcha ya lo puedes abrir”.
Manuel abre su correo y el nuevo e-mail de Soraya aparece en
negrita. Habre el mensaje, clikea en datos adjuntos y ……. la propia cara de Manuel lo mira con una manchada gorra de pintura
desde el la pantalla de su portátil.
A la tarde siguiente, Manuel toca el timbre de la casa de al
lado.
En la mano lleva un enorme ramo de rosas blancas.
Sorpresas nos da la vida! Una historia que se puede dar en muchas ocasiones, no aguantamos al vecino por tenerlo cerca, en cambio, que ser tan maravilloso nos parece el amigo con el que chateamos todos los días.
ResponderEliminarUn abrazo Karras.
Es lo que tiene internet Rafaela, que acerca a los lejanos y aleja a lo cercanos. Paradojas del ser humano. Un besazo.
EliminarJejeej Karras, muy bueno y ¿por qué no? internet es así.
ResponderEliminarMira, andaba yo por un chat y, hablando con una chica de Barcelona resultó que era la nieta de la que me vendió mi casa de ahora :) Pero vamos, que no hablaba con ella porque supiera tenía vínculos con mi pueblo ni nada, surbió así.
O una vez que hablaba con otra chica de C. Real capital y se me ocurrió decirle que si sabía de algún piso de alquiler por allí para un amigo.
Y me suelta, claro, trabajo en una inmobiliaria. ¿De qué tipo lo quiere?
Al final pues tuve que acompañar a mi amigo a ver el piso e invitar a la chica a un cafetillo :)
Me has hecho sonreír con tu relato, está guapísimo.
Un abrazo.
Pues fíjate que casualidades mas hermosas Dany. Yo conozco alguna pareja que se conocieron por la red y ahora son muy felices. Nunca sabes donde esta tu destino ni como va a llegarte. Un abrazo grande.
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarDesde la última vez que me pasé por tu bosquecillo veo, con agrado, que has cambiado el aspecto del mismo. Sin duda has mejorado lo inmejorable.
ResponderEliminarUn besito con rumores del bosque, de mi bosque gallego.
Me alegro de que te guste Elizabeth. Trato de hacerlo más acogedor y con aire de fantasía. Dos besos uno algo más pequeñin ya sabes.
EliminarEl destino es muy caprichoso! Asi tan cerquita no llegan tarde a las citas. Buenísima historia, espera, que te estoy viendo por la ventana...
ResponderEliminarBesotes con sorpresa torpedo!
¿Te ha gustado lo de la ventana?. Casualidades, volvía de paseo con Molly y Filla y se me ocurrió mirar atrás. Un besote Ion.
EliminarNn bonito relato y mira que bien que lo hayas recopilado, porque no le había leído, llegue tarde al otro blog y vaya que vaya, como cambia la vida, de un día para otro odias a tu vecino y luego descubres que es el amor de internet.
ResponderEliminarMuchas gracias por participar.
Un besazo.
Hola Tamara. Otra casualidad de que de pronto me acorde de los inicios. Pero bueno lo importante es que te guste y poder participar con vosotros. Un besote.
EliminarHola mago, caray que bonita historia que escribiste mago, nunca sabemos donde podemos encontrar el amor, pero como en tu historia se de algunos que se conocieron así, gracias por rescatarla ya que no la llegue a conocer en el otro blog, pero siendo una romanticona como soy me ha encantado la historia, poniéndose verdes ellos y sin saberlo jeje, aunque pienso que ella si lo sabia:)
ResponderEliminarLas imágenes ya no se que decirte de lo bonitas que son, que maravilla chiquillo:)
Muchos besotes!!
Si yo pienso como tu Piru. Las mujeres teneis un sexto sentido para esto. Pero Soraya sin duda dejó que las circunstancias siguieran su curso para que desembocaran en buen puerto. Gracias por lo de las imágenes, ya sabes que siempre estoy de caza jajaja. Besotes grandes.
EliminarPrecioso, me encantó, Karras. Parece que lo que se piensa se atrae sin nosotros saberlo…En el cosmos donde pernoctan los verdaderos filamentos de los pensamientos, ellos juegan y se atraen…y no son puras coincidencias, son informaciones de energía. Veo que sus almas se identificaban y según la última imagen…ustedes se juntaron.
ResponderEliminarTe invito a leer mi 2do blog de Vanidad de Vanidades…
Un abrazo y feliz semana
Hola Ceciely. Recuerdo una frase de Paulo Cohelo que venía a decir mas o menos lo que tu me cuentas. Y es que cuando tu deseo es enorme el universo entero conspira para concedértelo. Sin duda Soraya y Manuel mandaron mensajes de amor por el cielo. Ahora mismo voy a visitarte. Faltaría más. Un besote grande.
EliminarRecuerdo la historia torpedo y es que uno nunca sabe donde la tiene y menos cuando las cosas pasan a traves e la red donde cada uno se puede hacer una idea equivocada de como es el resto.
ResponderEliminarun abrazoteeeeeeeeee
Ya te digo socio. Anda que no pasan casos como este aunque parezca de cuento ¿Verdad?. Un abrazo grande.
EliminarLas circunstancias del destino se tornan aún más caprichosas con la amplitud que despliega internet, donde todo es posible.
ResponderEliminarUn relato genial amigo, como siempre, encuentras la formula para transmitir emociones.
Abrazos.
¡¡Que coincidencias!! ¿verdad Jorge?. En los adelantos que suponen un enfriamiento de los sentimientos resulta que de repente todo da la vuelta y sirve para acercar a dos corazones solitarios. Que cosas. Un abrazo amigo.
EliminarNinguno de nosotros puede predecir el mañana, sin un hoy, miles de ideas podemos tener, hasta que en un momento como por obra de magia se desatan todas las energías del universo para que surja el amor, quien sabe si ya no estaban predestinados a estar unidos.
ResponderEliminarUna muy linda historia y puede llegar a realizarse, tengo dos amigos que se conocieron por Internet, él de mexicano y ella ecuatoriana, recuerdo cuando comenzaba el romance y me hacían cómplice de todos sus sueños y hoy, están felizmente casados y viven juntos en Mexico.
El mañana es impredecible y el amor un angelillo travieso, heraldo de los dioses, tremendo el chiquillo, jajaja.
Gracias por compartirla, no la había leído.
Besotes para todos
Recuerdo la historia, es bonita y divertida de verdad, desde luego, hay que ver cómo nos las gasta el destino.
ResponderEliminarTe dejo un beso Karras.