Una
de las que considero grandezas de esta
vida, es que nunca deja de sorprenderme.
Últimamente
estamos asistiendo a una bandeja de declaraciones papales que están
revolucionando incluso a los altos cargos de los representantes de Dios en la
Tierra.
Muchos
a favor (todo hay que decirlo) pero lo más asombroso es que muchos más de los
encargados de repartir SU palabra entre los hombres, están en contra.
Algunos
(por ejemplo) le recriminan que haya escogido desplazarse en un Renault 4 (el
cuatro latas de toda la vida vamos) en vez de hacerlo en el lujoso
papamóvil. Si se indignan por esto, no
quiero ni pensar lo que le harían al hijo de Dios cuando se presentó a lomos de
una borriquilla, serían capaces de crucificarlo.
¡¡¡Aaahh
calla que no me acordaba que ya lo hicieron!!!.
Otro
de los agravios que ha osado este hombre dedicar a tan insignes cargos, fueron
las declaraciones que hizo cuando se le preguntó por el tema de los
homosexuales, contestando: “¿Quien soy yo para impedir a nadie la búsqueda de
Dios?.
Lo
que no se pararon a pensar es en la suerte que han tenido ya que Don Francisco
tenía razón, porque si decidiese impedirlo tendría que empezar por toda esa
caterva de pederastas y depravados con sotana que durante décadas y décadas han
ensuciado el buen hacer de los que sí
creen en las enseñanzas del “Hijo del
Hombre”.
Después
habló de habilitar ciertas construcciones eclesiásticas en desuso como refugio
de los más desfavorecidos y por supuesto no cobrar nada por ello.
Grande
es la ira de los arrendatarios de los mismos por los cuales nunca llegaron a
pagar impuestos y que consiguieron por la fórmula del “me lo quedo”. No tienen
en cuenta que con las aportaciones económicas del pueblo es con lo que directa
o indirectamente se mantienen dichos bienes mientras fuera la gente se suicida
por los desalojos efectuados.
Últimamente
(supongo que entre más declaraciones) se ha dejado entrever la posibilidad de
que pudiera nombrar cardenal a una mujer.
¡¡¡¡POR
EL AMOR DE DIOS QUE BLASFEMIA ES ESTA!!!!
¿Cómo
se va a atrever a introducir un ser impuro en este reducto de gordas panzas y manos enjoyadas?.
¿Qué
va a ser del futuro de la iglesia si se permite a un ser inferior estar a la
misma altura de los elegidos por el Señor?
Ay
perdón que no ha sido Dios el elector directo sino que en su infinita sabiduría
lo ha hecho por mediación de los
ministros del cielo.
¡¡¡Ministros
de pitanzas!!! Como se decía en la película de “El Abuelo”.
¡¡¡Vaya
por Dios!!! Este hombre se está buscando el castigo divino.
Pues
mire usted Santidad:
Yo, era uno de esos forzados ateos que han creado toda esa banda que ahora se postulan en contra suya.
Yo, era uno de esos forzados ateos que han creado toda esa banda que ahora se postulan en contra suya.
Soy
una de esas personas que ya tenía casi seguro la inexistencia de Dios viendo
cómo eran sus emisarios.
Soy
uno de tantos que estaban perdidos en busca de dioses alternativos porque (a
pesar de haber crecido con la religión católica) había perdido la fé que trataron por todos los medios de
inculcarme.
Aún
estoy algo receloso, no se lo voy a negar porque incluso allegados míos me advierten
de que puede tratarse de una de tantas tretas de la iglesia para ganar adeptos
y lavar su imagen tan deteriorada en los últimos tiempos.
Pero
de una cosa estoy seguro, si todo lo que nos dice es mentira, tan solo será eso
una mentira más de la iglesia y yo ya estoy acostumbrado a los golpes por tanto,
sería un golpe más.
Pero
lo que no estoy dispuesto a asumir es el riesgo de no creer que por fín Dios haya mandado al verdadero
intérprete de sus palabras. Aunque la
idea me hunda en el fango prefiero hundirme a pasar el resto de mi vida
arrepintiéndome de no haberla seguido.
Aún tengo esperanza en el hombre.
Aún
creo que el amor imperará y seremos dignos de aquel que puso su confianza hasta
el punto de llegar a la cruz por nosotros.
Aun
creo en los que entregan incluso la vida por otros.
Aun
quiero creer.
No,
no descarto que pueda estar equivocado y he dicho que asumo ese riesgo, pero
hasta que tenga o no la certeza de mi decisión…… ¿Le importaría a su Santidad
dejarme un trocito de asiento a su lado dentro de tan romántico vehículo?.
Verá
es que además soy un nostálgico y de siempre me gustaron los cuatro latas.
Lo único que piden coches como este, es un
empujoncito para “ARRANCAR” pero luego van de maravilla
oye...... Como Dios manda.
HACEDME
EL FAVOR DE SER FELICES KARRAS.